SpaceX obligado a esperar más tiempo para la autorización de vuelo Super Heavy
Solo unos días después de que el jefe de SpaceX, Elon Musk, dijera que esperaba ver el cohete Starship de próxima generación realizar su primer vuelo orbital en mayo, surgió un problema que tiene el potencial de retrasar el plan.
SpaceX está esperando que la Administración Federal de Aviación (FAA) le otorgue permiso para lanzar el cohete desde su sitio en Boca Chica, Texas.
Se suponía que se publicaría una decisión a fines de 2021, pero la agencia dijo que estaba tardando más de lo esperado en completar el trabajo necesario y terminó posponiendo la fecha hasta febrero y luego hasta fines de este mes.
Pero ahora la FAA dice que planea revelar su decisión el 29 de abril.
La FAA dice que necesita más tiempo para realizar una revisión que cubra varios problemas relacionados con el lanzamiento. Incluye la evaluación de “sobrevuelo de áreas pobladas y contenidos de carga útil; preocupaciones de seguridad nacional o política exterior; requisitos de seguro para el operador de lanzamiento; y el impacto ambiental potencial”.
De acuerdo con la ley federal, la revisión invita a los miembros del público a ofrecer sus puntos de vista. La respuesta parece haber sido abrumadora, ya que la FAA sigue diciendo que necesita más tiempo para evaluar la gran cantidad de comentarios. También es necesario completar varias consultas y debates.
Si la FAA ofrece la autorización de lanzamiento de SpaceX a fines de abril, entonces es posible que la compañía de vuelos espaciales pueda cumplir con su última fecha de lanzamiento prevista en algún momento de mayo.
Pero si la FAA no otorga a SpaceX el permiso que requiere, Musk dijo que Starship tendrá que ser trasladado a un sitio de lanzamiento en el Centro Espacial Kennedy en Florida, a unas 1,000 millas al este, acción que podría provocar que la fecha de lanzamiento se retrase. más allá de mayo.
El Starship, que comprende el propulsor Super Heavy de la primera etapa y la nave espacial Starship de la etapa superior, es capaz de impulsar más que cualquier cohete construido hasta ahora. La NASA espera usar el vehículo de lanzamiento para misiones tripuladas a la Luna, Marte y posiblemente más allá.
Pero primero hay que probar la Starship.
El vuelo debut verá al cohete Super Heavy llevar la nave espacial Starship a la órbita. Ambas secciones descenderán al océano, y la nave espacial aterrizará en el Pacífico unos 90 minutos después del despegue.
Los lanzamientos futuros implicarán que Super Heavy y Starship regresen a la Tierra y realicen aterrizajes verticales, de manera similar a cómo funciona el cohete Falcon 9 de SpaceX para misiones tripuladas a la ISS y lanzamientos de satélites, de modo que los componentes del vehículo puedan implementarse para múltiples misiones.
Ahora todos los ojos están puestos en el 29 de abril, cuando se espera que la FAA finalmente revele el resultado tan esperado de su extensa revisión.