Las 7 distopías futuras de ciencia ficción más geniales, clasificadas
Las distopías de ciencia ficción abundan, pero las que parecen verdaderamente únicas o distintas son mucho más raras. Una gran película de ciencia ficción crea su propia versión de la realidad, incluso cuando el mundo en el que se desarrolla su historia también comenta las realidades de nuestro mundo.
Cada película de esta lista presenta un mundo cuidadosamente elaborado que parece completamente real para el espectador, a pesar de lo miserables que puedan ser todos los personajes de la película. Se trata de mundos cuidadosamente elaborados, lo que sólo les ayuda a resonar más plenamente con el mundo en el que realmente vivimos.
7. Recuerdo total (1990)
Lleno del tipo de detalles vívidos que solo Paul Verhoeven podía imaginar, Total Recall se desarrolla en un año 2084 donde Marte ha sido colonizado y personas que se parecen a Arnold Schwarzenegger trabajan en la construcción.
La trama de la película presenta una serie de eventos que pueden ser realidad o no, pero lo más impresionante de esta película es la forma en que visualiza las muchas tecnologías que conforman su futuro distópico. Total Recall no tiene miedo de mostrarnos Marte, y cuando finalmente lleguemos allí, vale la pena esperar.
6. Los juegos del hambre (2012)
Ambientada en un futuro lejano en el que Estados Unidos ha sido devastado por el cambio climático y ahora es más pequeño y significativamente menos poblado, Los Juegos del Hambre imagina un futuro en el que 12 distritos están gobernados por un único Capitolio que los oprime en parte al obligar a algunos de sus hijos a luchar hasta la muerte.
Esa idea, que tiene su base en la historia, es bastante fuerte, pero lo que hace que la distopía de esta franquicia se sienta tan arraigada es la forma en que la vestimenta y el comportamiento de aquellos con privilegios contrastan casi perfectamente con aquellos en los distritos que no tienen nada.
5. La matriz (1999)
Ambientada en un mundo donde los humanos existen simplemente para suministrar energía a las máquinas y viven solo en un simulacro de la realidad, The Matrix llegó en un momento en el que el mundo se tambaleaba al borde de algo nuevo. Sin embargo, lo que hizo que la película fuera un éxito tan rotundo fue la forma en que contrastaba el prístino pero artificial mundo de Matrix con la horrible distopía del mundo real.
Matrix argumentó que valía la pena salvar el mundo real, incluso si estaba fundamentalmente roto, y sus secuelas desarrollaron aún más esta idea, incluso si algunas personas las odiaban.
4. El planeta de los simios (1968)
La gran revelación al final de Planet of the Apes es parte de lo que hizo que la película fuera tan legendaria, pero incluso antes de llegar a ella, Planet of the Apes nos ofrece un mundo gobernado por simios lleno de sus propias reglas y estructuras legales.
Lo sorprendente de la película es la forma en que la mayor parte se desarrolla como un thriller legal, en el que un humano intenta explicar por qué tiene la capacidad de hablar en un planeta donde la mayoría de los humanos no la tienen. Aunque sus momentos finales convierten El planeta de los simios en una advertencia sobre la era atómica, la descripción que hace la película de su planeta titular es interesante mucho antes.
3. Akira (1988)
Se han hecho muchas películas geniales sobre las consecuencias del lanzamiento de la bomba atómica sobre Japón, pero ninguna imagina un futuro más aterrador que Akira .
Ambientada en un mundo en el que se lanzó una bomba atómica sobre Tokio 30 años antes, la película sigue a un joven que intenta salvar a su amigo de un experimento del gobierno. Sin embargo, cuando los poderes de su amigo comienzan a manifestarse, vemos los secretos del gobierno japonés en plena exhibición, así como una horrible metáfora del trauma de vivir la bomba atómica.
2. Wall-E (2008)
Ambientada en una versión de la Tierra cubierta de basura y abandonada hace mucho tiempo por la raza humana, Wall-E cuenta la historia de un robot recolector de basura que, sin darse cuenta, descubre que la Tierra se puede salvar. El viaje que emprende, que eventualmente se convierte en una historia de amor, es hermoso en sí mismo, pero Wall-E también imagina un futuro en el que la humanidad todavía existe, aunque ha estado casi completamente inmovilizada.
Su versión de la Tierra, en la que todo el planeta es ahora un desierto, es aún más cruda, y Wall-E sigue siendo una de las declaraciones políticas más abiertas de Pixar y una de sus mejores películas.
1. Blade Runner (1982)/Blade Runner 2049 (2017)
El mundo de Blade Runner y su secuela se siente tan vívidamente realizado, desde su arquitectura futurista en forma de pirámide hasta sus tecnologías de hologramas, que casi se queda con la competencia. El diseño de producción de ambas películas es legendario, al igual que la idea de replicantes que son casi imposibles de distinguir de las personas.
Cuando se combinan, estas dos películas sugieren un mundo completamente remoto del nuestro y de alguna manera familiar, y es esa combinación lo que hace que ambas películas sean tan atractivas.