El telescopio James Webb captura una hermosa galaxia con un monstruo hambriento en su corazón
Una nueva imagen del Telescopio Espacial James Webb muestra una galaxia cercana llamada Messier 106, una galaxia espiral que es particularmente brillante. A sólo 23 millones de años luz de distancia (que es relativamente cerca para los estándares galácticos), esta galaxia es de particular interés para los astrónomos debido a su bulliciosa región central, llamada núcleo galáctico activo.
Se cree que el alto nivel de actividad en esta región central se debe al monstruo que acecha en el corazón de la galaxia. Como la mayoría de las galaxias, incluida la nuestra, Messier 106 tiene un enorme agujero negro llamado agujero negro supermasivo en su centro. Sin embargo, el agujero negro supermasivo de Messier 106 es particularmente activo y devora material como polvo y gas del área circundante. De hecho, este agujero negro come tanta materia que, a medida que gira, deforma el disco de gas que lo rodea, lo que crea corrientes de gas que salen volando de esta región central.
"La galaxia tiene una característica notable: se sabe que tiene dos brazos adicionales 'anómalos' visibles en longitudes de onda de radio y rayos X, en lugar de en el visible", explican los astrónomos de Webb. “A diferencia de los brazos normales, estos están compuestos de gas caliente en lugar de estrellas. Los astrónomos creen que estos brazos adicionales son el resultado de la actividad del agujero negro, un efecto de retroalimentación observado también en otras galaxias. Probablemente sean causados por el flujo de material producido por la violenta agitación de gas alrededor del agujero negro, creando un fenómeno análogo a una ola que rompe en el océano cuando golpea una roca cerca de la costa”.
En la versión completa de la imagen, que fue tomada con la cámara de infrarrojo cercano (NIRCam) de Webb, se puede ver el núcleo galáctico activo en el centro en colores blanco azulados, rodeado por regiones naranjas y rojas que representan gas caliente. Las regiones verde y amarilla son los brazos adicionales de la galaxia creados por las dramáticas salidas de gas. El centro brilla intensamente cuando el material devorado por el agujero negro hace que el gas gire en espiral hacia él, creando fricción y calentándolo tanto que brilla, como se ve aquí en el infrarrojo.