Por qué necesita una lámpara de escritorio en su estación de trabajo
Pasamos mucho tiempo mirando pantallas de todos los tamaños y formas en estos días. Ya sea en nuestras computadoras portátiles, tabletas o teléfonos, nuestros días están llenos de espejos negros. Junto con el proceso de envejecimiento natural, esta es una combinación terrible para nuestros ojos.
Teniendo en cuenta lo cansados que pueden estar nuestros ojos con todas las pantallas, es una sorpresa que muchos de nosotros no invirtamos en suficiente iluminación. He aquí por qué eso es un problema.
Los efectos de la mala iluminación y el resplandor de la pantalla en los ojos
Para aquellos de nosotros que trabajamos y jugamos con pantallas, el cambio constante de píxeles y el resplandor pueden afectar nuestros ojos.
Según la Asociación Estadounidense de Optometría (AOA), existen varios síntomas del síndrome de visión por computadora: fatiga visual, dolores de cabeza, visión borrosa, ojos secos y dolor de cuello. Para los niños, el síndrome de visión por computadora conduce a una menor capacidad de atención, irritabilidad y mal comportamiento.
A medida que envejecemos, la cantidad de luz que necesitamos aumenta cada año. Si bien puede parecer que leer con poca luz no tiene efectos a largo plazo en la vista, la incomodidad puede hacer que sea menos productivo. Además, no tener suficiente luz puede agravar los problemas oculares existentes, como cataratas y problemas de retina.
Cómo elegir una buena lámpara de escritorio
Una forma de evitar los peligros de la mala iluminación y el deslumbramiento de la pantalla es invertir en una lámpara de escritorio. El objetivo de toda buena lámpara de escritorio es aliviar los síntomas de la fatiga visual reduciendo el contraste entre la pantalla y la oscuridad que la rodea. A continuación, se ofrecen algunos consejos para elegir los mejores para usted.
Ajustabilidad
Una buena lámpara de escritorio se puede ajustar fácilmente tanto en altura como en dirección. También debe ajustarse a las proporciones de su escritorio o área de trabajo. Las lámparas de escritorio deben funcionar como iluminación auxiliar para las áreas más tenues que rodean la pantalla, no como iluminación directa.
Hay seis tipos básicos de lámparas de escritorio entre las que puede elegir: ajustable, de cuello de cisne, de clip, de aumento o tipo banquero. En general, una lámpara con un pivote o un vástago flexible es ideal para la mayor movilidad.
Tipo de bombilla
Hay tres tipos de bombillas para cada lámpara: LED, fluorescentes (CFL) e incandescentes. Si bien existen ventajas y desventajas para cada tipo de bombilla, las bombillas LED son ideales debido a su larga vida útil, uso eficiente de energía y características de atenuación.
Idealmente, las bombillas LED de 5 a 10 vatios son adecuadas para la mayoría de las estaciones de trabajo. Para la iluminación de tareas, las luces frías de alrededor de 4000K son mejores para la iluminación, causando menos fatiga visual.
Rango de iluminación
Según Benq , unos 90 cm tanto a la izquierda como a la derecha de una pantalla debería ser un rango de iluminación adecuado. Como la mayoría de las lámparas de escritorio estándar tienen un rango de iluminación de 30 cm a 50 cm, debe considerar más de una lámpara si trabaja con varias pantallas. Al elegir una lámpara de escritorio, evite elegir bombillas parpadeantes que inducen un efecto de luz estroboscópica que causa mareos.
Mantenga la luz encendida
Cuando se trata de trabajar largas jornadas y hasta altas horas de la noche, tener una lámpara es una herramienta imprescindible. No solo es necesario para su productividad, sino que también es bueno para su salud en general.
Además de agregar una lámpara de escritorio o dos, puede ayudar a mantener sus ojos sanos por otros medios. Por ejemplo, puede utilizar el modo de reducción de la fatiga ocular o la oscuridad en sus dispositivos o reducir el brillo de la pantalla. Alternativamente, simplemente puede intentar disminuir el tiempo de pantalla por completo.
El tipo correcto de lámpara requiere prueba y error. A medida que nuestra vista cambia con el tiempo, también lo hacen nuestras diversas necesidades. Si bien puede parecer mucho trabajo al que prestar atención, vale la pena el esfuerzo para encontrar la lámpara perfecta para usted.